Emergencia Ebola

     

A los Superiores Provinciales

A toda la Familia Hospitalaria de San Juan de Dios

En sus sedes

 

Apreciados Hermanos y Colaboradores,

 

Con dolor y tristeza os comunico el fallecimiento del Hno. Manuel García Viejo en el Hospital Carlos III de Madrid. Como sabéis el Hno. Manuel fue repatriado a España el pasado día 22 de septiembre. Su estado desde su llegada era grave, aunque al día siguiente mejoró un poco y alimentó nuestras esperanzas, pero a partir de la noche del miércoles empeoró de manera importante, produciéndose el fallecimiento sobre las 18 horas de ayer jueves, 25 de septiembre. ¡Descansa en paz Manuel!

  

Unidos a toda la Orden, queremos dar nuestras condolencias a los Hermanos de la Provincia San Agustín de África, a la que pertenecía desde su fundación y también a los Hermanos de la Provincia de Castilla, donde inició su vida religiosa y a la que perteneció durante muchos años. Igualmente queremos dar nuestro pésame a la familia del Hno. Manuel, a la que se sentía muy unido.

 

Deseo expresar mi agradecimiento al Gobierno de España por su ayuda y disponibilidad para repatriar a nuestro Hermano, a las autoridades sanitarias y muy particularmente al personal que lo ha asistido durante estos días y que han hecho todo lo posible para restablecer su salud.

 

El ébola golpea de nuevo con fuerza a nuestra Orden y nos llena a todos de dolor. El testimonio de hospitalidad hasta la muerte de nuestro Hermano Manuel, junto con el de aquellos que ya entregaron la vida recientemente por la misma causa, es una llamada profética al mundo, a la Iglesia y a nuestra propia Familia Hospitalaria de San Juan de Dios, para no olvidar y seguir sirviendo y ayudando a la población de los países que sufren la epidemia sin control del ébola.

 

Sigamos pidiendo al Dios de la Vida por los pueblos de Liberia, Sierra Leona y Guinea Conakry e igualmente por nuestras Comunidades de Monrovia y Lunsar, para que el Señor los proteja bajo la intercesión de Nuestro Padre San Juan de Dios.  

 

Hno. Jesús Etayo

Superior General


A los Superiores Provinciales

A toda la Familia Hospitalaria de San Juan de Dios

En sus sedes

 

Apreciados Hermanos y Colaboradores,

 

Por la presente os informo que el viernes pasado el Hno. Manuel García Viejo, médico cirujano del Hospital San Juan de Dios de Lunsar (Sierra Leona) ha dado positivo al virus ébola y en la madrugada de hoy 22 de septiembre, ha sido repatriado a España para ser tratado en las mejores condiciones posibles en el Hospital Carlos III de Madrid. Su estado de salud no es bueno. La repatriación ha sido decidida respetando el criterio del Hermano Manuel quien despues de conocer el resultado del test nos pidió ser transferido a España. La misma ha sido posible gracias a la buena disposición del gobierno español que en todo momento nos dio su apoyo.

 

El contagio del Hermano no sabemos exactamente cómo se produjo. De hecho el hospital de Lunsar había sido cerrado después de varios casos de ébola y de acuerdo con el gobierno local, una vez desinfectado y pasado un tiempo de cuarentena, fue reabierto el pasado día 8 de septiembre. Imaginamos que fue a partir de ese momento, a pesar de que se habían tomado las medidas preventivas posibles.

 

Para todos nosotros y especialmente para los Hermanos y Colaboradores que están en Sierra Leona, esto supone un momento muy  complicado y esperemos que no haya más casos de contagio. En cuanto al hospital,  de acuerdo con el Administrador Apostólico de la diócesis, nuestra intención es cerrar de nuevo el centro. En este momento no tenemos la capacidad de continuar la actividad por nosotros mismos y necesitamos la coordinación y la ayuda del gobierno, de la Iglesia y de las entidades sanitarias internacionales, para poder hacer una labor eficaz y adecuada. Si se dan las condiciones, estamos disponibles con nuestros Centros para ser un eslabón más de la cadena, en los planes que se prevean para afrontar la dura situación. Os pido a todos vuestro apoyo y vuestra oración especialmente por todos ellos.  

 

Como sabéis todos la situación de la epidemia sigue sin controlarse, aumentando todavía los casos de contagio y de fallecimientos. Parece que la comunidad internacional está reaccionando con mayor determinación y se anuncian medidas importantes de apoyo, tanto de medios humanos como materiales y económicos. Nuestra intención, tanto en Liberia como en Sierra Leona,  es seguir estando al servicio de la población de ambas naciones, especialmente en estos momentos que más lo necesitan, con los criterios que he indicado en el punto anterior.  No obstante no os escondo que nos está resultando dificil, todavía más después de lo acaecido en Lunsar.

 

En estos duros momentos sintámonos unidos a la Provincia San Agustín de África, a la Comunidades y Centros de Liberia y Sierra Leona, para que entre todos la Orden pueda seguir dando la respuesta que el Señor, la Iglesia y los países implicados nos piden.

 

Oremos todos por el Hno. Manuel García Viejo y por todos los Hermanos y Colaboradores de ambos Centros y pidámosle al Señor a través de San Juan de Dios, que nos de la fuerza y la audacia para seguir manifestando y llevando el evangelio de la hospitalidad a quienes están sufriendo esta dura epidemia.     

 

Un abrazo fraterno, unidos en el Señor y en San Juan de Dios

 

 

 

Hno. Jesús Etayo

Superior General


A los Superiores Provinciales
A toda la Familia Hospitalaria de San Juan de Dios
En sus sedes

Apreciados Hermanos y Colaboradores,

Acabamos de recibir la noticia del fallecimiento del Hno. Miguel Pajares en el Hospital Carlos III de Madrid. Como sabéis el Hno. Miguel fue repatriado a España el pasado día 7 de agosto, junto con la Hermana Juliana. Su estado hasta el día de ayer era estable dentro de la gravedad, pero en las últimas horas ha empeorado de forma muy importante, hasta llegar al desenlace fatal.

Estamos viviendo un momento muy duro para nuestra Familia Hospitalaria, con la pérdida de tres Hermanos, una Hermana y varios Colaboradores a consecuencia de esta epidemia del Ébola. Por eso pido a todos que nos sintamos muy unidos en la oración, en la hospitalidad y en la fraternidad. La vida de nuestros Hermanos entregada como la de Cristo hasta el punto de morir contagiados por esta epidemia, aunque nos llena de tristeza y dolor, la hemos de vivir también a la luz de la fe, con la esperanza y el sano orgullo de su fidelidad y testimonio radical de hospitalidad.

En nombre de toda nuestra Orden, queremos sentirnos unidos y dar nuestras condolencias a todos los Hermanos de la Provincia San Agustín de África, a la Congregación de las Misioneras de la Inmaculada Concepción y a todos los familiares de los tres Hermanos fallecidos, Patrick, George y Miguel, así como de la Hna. Chantal y de todos los Colaboradores que a causa de esta epidemia han fallecido en nuestros Centros de Liberia y Sierra Leona.

Sigamos pidiendo al Señor de la Vida, para que acoja en su Reino a todos nuestros Hermanos, Hermana y Colaboradores, como verdaderos campeones de la hospitalidad de San Juan de Dios. Asimismo continuemos orando por la realidad de aquellos países y por todos los miembros de nuestra Familia Hospitalaria de San Juan de Dios que continúan en Liberia y Sierra Leona.

Un abrazo fraterno, unidos en el Señor y en San Juan de Dios

Hno. Jesús Etayo
Superior General
A los Superiores Provinciales
A toda la Familia Hospitalaria de San Juan de Dios
En sus sedes

Apreciados Hermanos y Colaboradores,

Con suma tristeza comunico a toda la Familia Hospitalaria de San Juan de Dios el fallecimiento en el día de hoy, 11 de agosto, del Hno. George Combey en el Hospital de Elwa de Monrovia. Igualmente les informamos que el sábado día 9 falleció la Hna. Chantal Pascaline, Misionera de la Inmaculada Concepción en nuestro hospital Sant Joseph de Monrovia. Ambos a consecuencia del virus Ébola. Además hemos sido informados del fallecimiento de dos de nuestros Colaboradores en el hospital de Elwa en las últimas horas.

La situación en nuestro Hospital de Monrovia, una vez fallecida la Hna. Chantal se volvió insostenible y el mismo día fueron trasladados al hospital de Elwa el Hno. George, las Hnas Helena y Paciencia y otros Colaboradores. Por tanto siguen allí las Hnas. Misioneras de la Inmaculada Helena y Paciencia. Quiero agradecer al voluntario William Ekeurm, que ha asistido a los Hermanos y Hermanas hasta el último momento.

La situación del Hno. Miguel Pajares y de la Hna. Juliana Bonoha, repatriados a España la semana pasada, continua estable. Les informo también que desde Juan Ciudad ONGD, se está coordinando en este momento el envío de un equipo formado por algún Hno. de San Juan de Dios y profesional sanitario, para que llegue lo antes posibleal Hospital San José de Monrovia, puedan atender a las personas afectadas y reabrirlo cuanto antes.

En relación a Sierra Leona, no tenemos novedades respecto a la última comunicación. Solamente decir que están intentandoredimensionar el hospital de acuerdo a las necesidades actuales, ya que debido a la epidemia del Ébola, el hospital apenas tiene pacientes.

De nuevo quiero pedirles a todos la oración por los Hermanos Patrick y George, así como por la Hermana Chantal, para que encuentren reposo junto al Señor en su Reino.La entrega de sus vidas es un testimonio de hospitalidad sin límites para todos nosotros, que el Señor lo hará fructificar. Al mismo tiempo pidamos al Señor por nuestra Familia de Liberia y Sierra Leona para que el Señor y San Juan de Dios los protejan al igual qua a todo el pueblo que sufre de ambos países y de todos los demás países africanos donde la epidemia del Ébola está trayendo tanto sufrimiento.

Unidos de forma especial a la Provincia San Agustín de África en el Señor de la Vida y en San Juan de Dios, recibid todos un abrazo fraterno.

Hno. Jesús Etayo
Superior General
A los Superiores Provinciales
A toda la Familia Hospitalaria de San Juan de Dios
En sus sedes

Apreciados Hermanos y Colaboradores,

Me pongo en contacto con todos vosotros para informaros de la situación de nuestros Hermanos y de los Centros en Liberia y Sierra Leona que están viviendo este momento especialmente delicado a causa de la epidemia del Ébola y que el sábado día 2 de agosto causó el fallecimiento de nuestro Hermano Patrick en Monrovia.

La situación continúa siendo muy delicada en ambos países, donde los casos de contagio y fallecimientos siguen aumentando al igual que en Guínea Conakry, país vecino a ellos. No está controlada la epidemia, a pesar de que los gobiernos de dichos países y también la OMS están tomando medidas, al parecer por el momento insuficientes.

En lo que respecta a nuestro Centro de Monrovia, desde hace unos días está cerrado. Desgraciadamente el Hno. Miguel Pajares y dos Hermanas Misioneras de la Inmaculada Concepción, que colaboran con nuestros Hermanos en el Hospital, así como dos Colaboradores, han dado también positivo al test del Ébola. En el día de hoy, 7 de agosto, las autoridades españolas han repatriado a Madrid el Hno. Miguel Pajares y la Hna. Juliana Bohí. El resto del grupo no ha sido posible. Allí han quedado el Hermano Georges Combey, cuatro Hermanas, dos con el Ébola yalgunos colaboradores. Nuestros esfuerzos ahora se centran en intentar que todo el grupo pueda permanecer en nuestro Centro, para ser atendidas adecuadamente, si bien la situación es delicada, las condiciones sanitarias y sociales muy precarias y la salud de algunos de ellos cada vez más débil.

En Sierra Leona nuestro Centro está operando a un nivel muy bajo, debido a que dada la situación los enfermos tampoco van a los hospitales. Por el momento los Hermanos se encuentran bien, aunque a lo largo de los últimos dos meses algunos colaboradores han perdido la vida a causa del Ébola. Evidentemente no se puede bajar la guardia en ningún momento, porque a nivel del país el tema no está controlado sino todo lo contrario.

Esta situación nos pone también la dificultad de mantener las dos estructuras sanitarias, debido que al estar cerrado uno y el otro con poca actividad, necesitarán ayudas económicas extraordinarias para su mantenimiento, al menos hasta que se reestablezca la normalidad. Por eso aprovecho la ocasión para solicitar de toda la Orden y de las Instituciones cercanas a nosotros la colaboración, la solidaridad y la generosidad en estos dificiles momentos.

De nuevo pido a toda la Familia Hospitalaria de San Juan de Dios en todo el mundo que nos unamos en la oración para pedir al Señor, a través de Nuestra Sra del Patrocinio y de San Juan de Dios, por estos pueblos que tanto están sufriendo y particularmente por nuestros Hermanos y por toda la Familia Hospitalaria de San Juan de Dios de Liberia y Sierra Leona, así como de toda África.

Unidos en el Señor de la Vida y en San Juan de Dios recibid mi saludo fraterno

Hno. Jesús Etayo
Superior General   

 

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